En él iré publicando artículos propios tanto de política, poesía, música, filosofía...etc.
Todos los artículos y trabajos que publique en esta página serán de uso, consumo y beneficio libre, exceptuando las poesías, todas ella registradas.
Hechos como el desprecio de los políticos y de algunos ciudadanos por la cultura; el fanatismo exagerado ante deportes, "costumbres", ídolos...etc; la mentira como forma natural de supervivencia o el martirio y las depresiones voluntarias, son las principales fuerzas para mi inspiración y para mi escritura.
Día tras día los telediarios se vuelven cada vez más funestos y descorazonadores. Nos hablan de hecatombe en España y en el Mundo a pasos agigantados. Las malas noticias nos llegan hasta el cuello y nosotros, en vez de utilizar el maravilloso órgano que tenemos, llamado cerebro, para proponer, lograr, emprender, inventar, cambiar, subir, crecer e intentar hacer de nosotros y del resto algo mejor, seguimos buscando el por qué de esta situación. Por qué estamos sin aire a trescientos metros bajo el mar.
No escribo para multitudes ni para núcleos o grupos, escribo para la persona. Para el individuo. La época donde se decía "No cambies al mundo, cámbiate a ti mismo" no pasaba por el momento en el que estamos nosotros. El mensaje actualmente, a mi ver, es muy distinto:
"Cámbiate a ti, y si lo logras, cambia el Mundo"
Dicen que cada siglo aparecen unos cinco genios en total. Cinco genios en todos los aspectos en los que la palabra genio tiene un sentido racional y no fanático ni popular. Debido a la posibilidad de surgir dudas, apunto unos cuantos genios para que les sea más fácil comprender a qué me refiero:
-Leonardo Da Vinci, Isaac Newton, Alexander Graham Bell, Albert Einstein, Thomas Alva Edison, Shakespeare, Pablo Picasso, Wolfang Amadeus Mozart, Antoni Gaudí, Nicolas Copérnico, Miguel de Cervantes, J. S. Bach, Gustavo Adolfo Bécquer...etc.
Bien, si la gente en vez de esperar a convertirse en genio por ciencia infusa intentase realmente serlo y aprovechase su tiempo, sus ideas y sus posibilidades para ello, estoy plenamente convencido de que el número que he señalado antes crecería notablemente. ¿Qúe ocurre? Dinero, reconocimiento, comercialización, modas, parte de nuestro círculo e incluso nuestro propio cerebro dificultará mucho el camino hasta lo ya dicho. Encerrad al pánico, los diamantes se forman con presiones de millares de atmósferas y a temperaturas superiores a los mil grados. Ánimo.
Partimos desde una posición favorable, aunque esta sea muy negra a la par que realista y esperanzadora:
Nosotros tenemos la suerte de poder decidir cambiar esa imagen, cada uno personalmente. Es difícil, pero hay que dar las gracias, porque al menos, está en nuestras manos.
Muchas gracias por vuestro tiempo. Tened Cabeza.
